Una antigua leyenda de los indios americanos, siempre era de día y el sol nunca se ocultaba. En aquella época las únicas criaturas que eran felíces eran las serpientes. Un día el jefe indio fue a su morada. El rey de las serpientes se enfadó y le dijo que quería. El jefe indio le pidió oscuridad a cambio de una lanza de oro pero el rey serpiente no la aceptó porque no tenía manos, entonces el jefe indio rápido de pensamiento le ató un cascabel en la cola y el rey serpiente lo aceptó. Entonces le dio un saco de oscuridad y el jefe indio lo cogió y notó que había poca oscuridad y le dijo al rey Serpiente que había muy poca oscuridad y el rey Serpiente le contestó que le iba a dar toda su oscuridad a cambio de que le diera el veneno embadurnaban sus flechas y el jefe indio aceptó. El jefe indio le llevo el tonel de veneno y el rey Serpiente le dio toda su oscuridad pero le dijo que no abriera el saco por el camino porque si no seria el caos. El jefe indio se fue y tenia mucha curiosidad y abrio el saco y las serpientes se abalanzaron sobre el tonel de veneno y algunas serpientes consiguieron mucho veneno y otras poco.
En esta bitácora los alumnos/as de 4º y 6º de Primaria del CEIP Claudia Ciancas de Sasamón iremos escribiendo nuestros trabajos para compartirlos con vosotros. ¡Deseamos que la disfrutéis tanto como nosotros! ¡Buena navegación tripulantes...!
martes, 28 de octubre de 2008
El precio de la oscuridad
Una antigua leyenda de los indios americanos, siempre era de día y el sol nunca se ocultaba. En aquella época las únicas criaturas que eran felíces eran las serpientes. Un día el jefe indio fue a su morada. El rey de las serpientes se enfadó y le dijo que quería. El jefe indio le pidió oscuridad a cambio de una lanza de oro pero el rey serpiente no la aceptó porque no tenía manos, entonces el jefe indio rápido de pensamiento le ató un cascabel en la cola y el rey serpiente lo aceptó. Entonces le dio un saco de oscuridad y el jefe indio lo cogió y notó que había poca oscuridad y le dijo al rey Serpiente que había muy poca oscuridad y el rey Serpiente le contestó que le iba a dar toda su oscuridad a cambio de que le diera el veneno embadurnaban sus flechas y el jefe indio aceptó. El jefe indio le llevo el tonel de veneno y el rey Serpiente le dio toda su oscuridad pero le dijo que no abriera el saco por el camino porque si no seria el caos. El jefe indio se fue y tenia mucha curiosidad y abrio el saco y las serpientes se abalanzaron sobre el tonel de veneno y algunas serpientes consiguieron mucho veneno y otras poco.
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Ernesto Oviedo